Lavado de Activos

El lavado de dinero (también conocido como lavado de capitales, lavado de activos, blanqueo de capitales u operaciones con recursos de procedencia ilícita o legitimación de capitales) es una operación que consiste en hacer que los fondos o activos obtenidos a través de actividades ilícitas aparezcan como el fruto de actividades lícitas y circulen sin problema en el sistema financiero. Para que exista blanqueo de capitales, se precisa la previa comisión de un acto delictivo de tipo grave, y la obtención de unos beneficios ilegales que quieren ser introducidos en los mercados financieros u otros sectores económicos. El blanqueo de capitales es un delito autónomo que no requiere de una condena judicial previa por la comisión de la actividad delictiva por la que se originaron los fondos que se blanquean.
Prevención Lavado de Activos
De conformidad con la Resolución No. JB-2012-2147 de la Junta Bancaria, emitida por la Superintendencia de Bancos y Seguros, se promulgan las Normas para las instituciones del sistema de seguro privado sobre prevención de lavado de activos, financiamiento del terrorismo y otros delitos. Conforme con los mecanismos de control y en cumplimiento y aplicación de las normas de Prevención referidas, Seguros Constitución C.A., a través de su Oficial de Cumplimiento ha venido trabajando en implementar los procedimientos de control para evitar que la institución pueda verse involucrada como instrumento de actividades delictivas o para financiarlas, es así que se ha diseñado el Manual de Control Interno para Prevención Lavado de Activos, Financiamiento del Terrorismo y Otros Delitos. Este Manual tiene como objetivo proporcionar un conocimiento estricto sobre prevención de lavado de activos aplicado a la realidad de Constitución C.A. Compañía de Seguros y Reaseguros, para que sus directores, funcionarios y empleados puedan entender y aplicar lo dispuesto en este documento y evitar que la institución, en la realización de sus operaciones, pueda verse involucrado o pueda ser utilizado como instrumento para el ocultamiento, manejo, inversión o aprovechamiento en cualquier forma, de dinero u otros bienes provenientes de actividades delictivas o para financiarlas.
En Seguros Constitución C.A. somos responsables de velar por la integridad de la empresa que representamos y por el país al que pertenecemos.

Historia

Hay autores como Uribe, “Cambio de paradigmas sobre el lavado de activos”, artículo publicado en que señalan que los delitos con el dinero, tanto falsificación como lavado, han existido incluso antes de que existiera el dinero tal y como lo conocemos hoy. Sin embargo, la costumbre de utilizar prácticas para disfrazar los ingresos procedentes de actividades ilícitas se remonta a la Edad Media cuando la usura fue declarada delito. Mercaderes y prestamistas burlaban las leyes y la encubrían mediante ingeniosos mecanismos. Fue en ese momento, cuando los piratas se transformaron en pioneros en la práctica del lavado de oro obtenido en los ataques a las naves comerciales europeas que surcaban el Atlántico entre los siglos xvi y xviii. A la piratería clásica se añadieron las prácticas de los bucaneros y filibusteros ayudados encubiertamente por determinados gobiernos europeos. El caso más famoso es el del pirata inglés Francis Drake, que fue armado caballero en su nave por la reina Isabel I de Inglaterra, en recompensa por sus exitosos asaltos a puertos y barcos españoles. En 1612, Inglaterra ofreció a los piratas que abandonaran su profesión un perdón incondicional y el derecho a conservar el fruto de sus felonías. Una gran parte de las riquezas acumuladas por los corsarios y piratas fueron resguardadas por los herederos de la tradición templar y por los banqueros de la época. Así surgieron los refugios financieros, versión moderna de aquellas antiguas guaridas. Con el poderío económico y militar de los piratas y corsarios, las poblaciones europeas y americanas llegaron a creer
que tanto el comercio como las finanzas dependían enteramente de ellos. Los gobernantes de la época reconocieron que los tratados y leyes en vigor eran insuficientes en la lucha contra los piratas y convocaron a reconocidos juristas como Hugo Grotius y Francisco de Vittoria para buscar una solución de carácter jurídico. El resultado fue la creación de los primeros conceptos del derecho internacional,​ demare nostrum, de mare liberum y la persecución en caliente. El resultado de estas acciones fue la casi completa eliminación de este fenómeno criminal. La palabra “lavado”, tiene su origen en Estados Unidos en los años 20, momento en que las mafias norteamericanas crearon una red de lavanderías para esconder la procedencia ilícita del dinero conseguido a través de sus actividades criminales. El mecanismo consistía en presentar las ganancias procedentes de actividades ilícitas como procedentes del negocio de lavanderías. Dado que la mayoría de los pagos en las lavanderías se hacía en metálico, resultaba muy difícil distinguir que dinero procedía de la extorsión, tráfico de armas, alcohol y prostitución y cual procedía del negocio legal. En los años setenta con la vista puesta en el narcotráfico se advirtió de nuevo el fenómeno del blanqueo de dinero. La recaudación de la venta de droga era depositada en los bancos sin ningún tipo de control. Una vez introducido el dinero en los sistemas financieros oficiales se movía fácilmente por el circuito formal. La expresión fue utilizada por primera vez judicialmente en 1982 en los Estados Unidos al ser confiscado dinero supuestamente blanqueado procedente de la cocaína colombiana.

Terrorismo

El terrorismo es el uso sistemático del terror para coaccionar a sociedades o gobiernos, utilizado por una amplia gama de organizaciones, grupos o individuos en la promoción de sus objetivos, tanto por partidos políticos nacionalistas y no nacionalistas, de derecha como de izquierda, así como también por corporaciones, grupos religiosos, racistas, colonialistas, independentistas, revolucionarios, conservadores y gobiernos en el poder.

 

El terrorismo, como táctica, es una forma de violencia que se distingue del terrorismo de Estado por el hecho de que en este último caso sus autores pertenecen a entidades gubernamentales. Se distingue también de los actos de guerra y de los crímenes de guerra en que se produce en ausencia de guerra. La presencia de actores no estatales en conflictos armados ha creado controversia con respecto a la aplicación de las leyes de guerra.

 

La palabra «terrorismo» tiene fuertes connotaciones políticas y posee elevada carga emocional y esto dificulta consensuar una definición precisa.

Es común el uso de la palabra por parte de gobiernos para acusar a sus opositores. También es común que las organizaciones e individuos que lo practican rechacen el término por injusto o impreciso. Tanto los unos como los otros suelen mezclar el concepto con la legitimidad o ilegitimidad de los motivos propios o de su antagonista. A nivel académico, se opta por atender exclusivamente a la naturaleza de los incidentes sin especular sobre los motivos ni juzgar a los autores.

La historia del terrorismo es una historia de individuos bien conocidos e históricamente significativos, entidades e incidentes asociados, con razón o sin ella, con el terrorismo. Expertos concuerdan en que el terrorismo es un término disputado, y muy pocos de los etiquetados de terroristas se describen como tal. Es común para los opositores en un conflicto violento describir al otro lado como terroristas o como practicantes de terrorismo.

 

Dependiendo ampliamente cómo se define el término, las raíces y la práctica del terrorismo se remonta al menos al siglo 1, en esa época una organización llamada Sicarii cometía actos de terrorismo contra colaboradores de los romanos y gente adinerada, aunque algunos disputan si el grupo que asesinó a colaboradores romanos en la provincia de Judea, era en realidad terrorismo. El primer uso del término «terrorismo» ocurrió durante el Reinado del Terror de la Revolución francesa, cuando los Jacobinos, que gobernaban el estado revolucionario, emplearon la violencia, incluyendo las ejecuciones en masa por guillotina, para obligar a tener obediencia al

estado y a intimidar a los enemigos del régimen. ​ El término terrorismo muchas veces se asocia con el estado de violencia e intimidación, esta asociación duró hasta el siglo 19, cuando comenzó a asociarse con grupos no gubernamentales. El Anarquismo, a menudo en connivencia con el nacionalismo, fue la ideología más destacada vinculada con el terrorismo. Cerca del final del siglo XIX, los grupos anarquista cometieron varios asesinatos de gente importante de la época como el asesinato del Zar ruso y el Presidente de Estados Unidos.

 

En el siglo XX, el terrorismo continuó siendo asociado con una gran variedad de grupos anarquistas, socialistas, fascistas y nacionalistas, muchos de ellos apoyaban en las luchas anticoloniales. Algunos eruditos también eran etiquetados como terroristas y acusados de violencia sistemática, el estado los amenazaba constantemente, tal es el ejemplo de la Unión Soviética estalinista y la Alemania Nazi donde los eruditos eran tachados de terroristas y eran perseguidos.